SATSE rechaza el cierre de una unidad más en el Hospital de El Bierzo en verano

SATSE ya denunció que en estos meses de verano se cerraban 119 camas de varias unidades hospitalarias en la provincia de León: la 2ª B y Preingresos del Hospital de El Bierzo; la planta décima del Hospital de León y la planta 2ª izquierda del Monte San Isidro, y ahora se conoce que se añade el cierre de una planta más en el Hospital berciano, lo que supondrá cerrar una cuarta parte de dicho centro, es decir, 88 camas.

SATSE León insiste en lo negativo de esta situación para la atención sanitaria que se puede prestar a los pacientes por la pérdida de la calidad asistencial y por la gran presión que implica para los profesionales que no descansan, porque, además, este cierre se produce justo después de conocerse que los Hospitales de El Bierzo y Salamanca son los únicos que no mejoran sus cifras de listas de espera.

El Sindicato de Enfermería rechaza estas decisiones porque generan graves trastornos en el funcionamiento de los centros, con perjuicio para los ciudadanos y los profesionales, lo que revela la falta de previsión y sensibilidad de Sacyl. Un ejemplo ha estado esta semana en Salamanca, donde ha tenido que reabrirse de forma improvisada una planta clausurada, lo que demuestra que el argumento de Sacyl de que esas camas no son necesarias en verano porque disminuye la presión asistencial es falso.

SATSE exige a Sacyl que analice las prioridades para preservar las necesidades de la población y de las plantillas porque, además, estos centros atienden en estos meses a población rural que tiene una alta demanda por el aumento de la población de vacaciones, las celebraciones de fiestas y accidentes propios de estas fechas, lo que vuelve a invalidar el argumento de los responsables sanitarios.

Además, SATSE destaca que estos cierres implican también que se mezclen pacientes con distintas patologías en una misma unidad y que esto puede suponer un riesgo de que haya pacientes que puedan adquirir infecciones nosocomiales, que son las que se pueden adquirir en los hospitales.

Asimismo, SATSE León quiere insistir en que esta decisión tiene consecuencias muy graves en las condiciones laborales y profesionales de las enfermeras de los servicios que se cierran, porque estas profesionales se ven obligadas a trabajar en otras unidades donde no están especializadas, a cambiar sus turnos de trabajo y a ajustar sus vacaciones a los equipos de enfermería donde se les asignan; algo que al final redunda en la calidad de la atención sanitaria a los pacientes.