Hemeroteca

Considera que es una tomadura de pelo para el resto de empleados y para los ciudadanos

SATSE critica el trato desigual que la Junta ha dado a los empleados públicos al aceptar las pretensiones de los médicos

El Sindicato de Enfermería, SATSE, de Castilla y León critica el trato desigual que la Junta de Castilla y León y, en concreto, la Consejería de Sanidad, han dado a los empleados públicos de la Comunidad, así como el agravio comparativo que supone para ellos el haber aceptado las propuestas del colectivo médico en el acuerdo alcanzado entre CESM y la citada Consejería y que permitirá que a los médicos no se les apliquen las medidas de recorte en igual medida que las que se aplicarán al resto de empleados públicos.

SATSE no puede consentir que la Junta de Castilla y León aplique el aumento de la jornada laboral a 37,5 horas semanales a todos los empleados públicos, anulando toda negociación previa, y acepte ser flexible con el colectivo médico en la aplicación de ese aumento de la jornada para los médicos al asumir que se aplicará en función de las necesidades asistenciales y de la organización del trabajo en los centros sanitarios, algo que deciden exclusivamente los médicos y los responsables de esos centros, que hay que recordar, también son médicos.

SATSE considera que con este acuerdo y la Ley de Medidas Tributarias, Administrativas y Financieras, el Gobierno regional da carta blanca a los médicos para organizar su jornada y, además, impide a los restantes empleados públicos poder hacer lo mismo al imposibilitar en el articulado de esa ley la negociación previa que sí se les permite a los médicos.

SATSE quiere manifestar además que este agravio comparativo es una tomadura de pelo para empleados públicos y ciudadanos porque sólo se han tenido en cuenta las propuestas de un colectivo y no el interés general. Basta recordar que si bien desde la Consejería se afirmaba que se eliminarían las peonadas que realizan los médicos, tras el acuerdo, esas peonadas se van a seguir permitiendo al menos durante lo que resta del 2012. Los ciudadanos deben saber que se trata de una actividad enormemente costosa para la sanidad pública y que no está fiscalizada porque no figura en partida alguna de los Presupuestos generales de la Comunidad autónoma.

La Junta debería explicar a los ciudadanos que, si como dice, pretende reducir el déficit público, cómo es posible que el aumento de jornada o la eliminación de las peonadas no se apliquen al colectivo médico. Además, la propia consejera de Hacienda, Pilar del Olmo, exigió en la sesión de las Cortes regionales “más sacrificios, renuncias y ser más solidarios” a todos los ciudadanos, al tiempo que ha argumentado que una de las causas de que ese déficit se haya incrementado respecto a lo previsto sea el problema estructural de financiación de la sanidad. Asumir esto y sumir que los médicos no realicen los mismos esfuerzos que el resto de ciudadanos es un ataque a estos últimos.

Además, SATSE quiere recordar que la retribución extra por productividad variable fue de 12 millones de euros en 2011 y este Sindicato ha pedido que se prescinda de ello ante la situación de crisis en que nos encontramos.